La pantalla que aparece cuando el sistema operativo se está cargando siempre es la misma, por lo que puede acabar cansándote. BootSkin te permite cambiarla de la manera más fácil posible.
Para realizar dicha operación solamente es necesario escoger la pantalla de carga que hayas creado o descargado, la cual debe estar en formato BootSkin. Si lo deseas puedes optar por una de las que incluye el propio programa, siendo la conocida como Stardock Blue una de las más atractivas en términos visuales.
En caso de que quieras recuperar el diseño original de Windows basta con restaurarlo escogiendo el archivo en cuestión.
mostrar más